En este blog dedicamos mucho tiempo a hablar de equipos, desde protección contra caídas hasta plataformas de trabajo, andamios y elevadores. Sin embargo, preste atención al título de esta publicación del blog, en concreto a la palabra «hábitos». Al final, a menudo es nuestro comportamiento en el trabajo el que contribuye a los incidentes, no el equipo. Si elegimos la cuerda de seguridad incorrecta, ¿es culpa de la cuerda de seguridad? Si trepamos por una barandilla, ¿es culpa de la plataforma de trabajo? Si sobrecargamos la cesta de una plataforma elevadora con material, ¿es culpa de la plataforma elevadora? Nuestras acciones, cuando son inapropiadas, no cumplen las normas o son absolutamente inseguras, pueden ser desastrosas. Afortunadamente, nuestras acciones están completamente bajo nuestro control. Así que echemos un vistazo a las pequeñas cosas que podemos hacer que pueden marcar una gran diferencia en nuestra seguridad personal en una situación determinada, como trabajar en un techo. Tenga en cuenta que el hábito más importante que puede desarrollar para garantizar su seguridad en un techo es el uso adecuado de la protección contra caídas. Sin ella, nada más importará. Este artículo tiene como objetivo analizar otros hábitos MÁS ALLÁ del simple uso de protección contra caídas que pueden mantenerlo seguro.
1. Nunca des un paso atrás
Suena muy simple, ¿no? No retroceda. Sin embargo, sucede todo el tiempo y, aunque a menudo no tiene repercusiones negativas, en una situación de alto riesgo, como en un techo, podría ser un error crítico. ¿Está absolutamente seguro de dónde se encuentra? Tal vez sepa que no está directamente frente a un tragaluz (que debería estar protegido, pero por el bien del argumento, supongamos que no lo está), pero ¿qué pasa con ese tramo bajo de conducto o punto blando en el techo que le hará perder el equilibrio y caer en el tragaluz? ¿Está absolutamente seguro de qué tan cerca está de un borde? Tal vez crea que lo está, pero ¿cuánto tiempo ha estado parado o trabajando en ese lugar? ¿Cuánto se ha movido desde su punto original? Si ha estado concentrado en su trabajo, tal vez no esté exactamente donde pensaba que estaba. Dejando de lado las líneas de advertencia, los monitores de seguridad y otras consideraciones de protección contra caídas, este pequeño cambio de comportamiento puede ser literalmente un salvavidas.
2. Nunca mires el teléfono (ni ninguna otra distracción) mientras caminas
Este hábito se ha vuelto bastante malo en las aceras de la ciudad y en los centros comerciales, donde tratar de caminar sin chocar con un zombi atrapado en el teléfono se ha convertido casi en un deporte de contacto completo, pero hacerlo en el techo podría terminar en una situación mucho peor que tener que disculparse con alguien con quien chocaste accidentalmente. El techo, y los lugares de trabajo en general, no son lugares para distracciones. Si su empresa no tiene una política de no usar el teléfono (o usted ignora esa política), abandone el área de trabajo para atender una llamada telefónica. Busque un lugar seguro y quédese allí. No prestar atención mientras se mueve podría hacer que pise un lugar que no debería, o que golpee a un compañero de trabajo y provoque un incidente.
3. No trepes por encima de nada
No importa de qué se trate (equipo, tragaluces, parapetos u otros obstáculos), si no sabes qué hay al otro lado y no te proporcionan una forma segura de cruzar, busca otra forma. Tal vez necesites instalar una pasarela, una plataforma de trabajo, una escalera o algún otro medio, o tal vez solo necesites encontrar una ruta diferente; de cualquier manera, intentar escalar algo a ciegas o sin las protecciones adecuadas es simplemente pedir una caída. Claro, lo sabemos, tienes un gran equilibrio. Puedes escalar paredes como un insecto. Tienes la fuerza en las manos de un escalador de montañas. Todas esas cosas son fantásticas, hasta la única vez que fallan.
4. Disminuya siempre la velocidad al acercarse a un borde o una escalera
Con suerte, habrás asegurado la escalera en su lugar si es una escalera temporal, o los pernos están bien sujetos si es una escalera fija, pero la verdad es que, sin importar lo que hagas, nunca puedes estar 100% seguro de en qué estado se encuentra una escalera antes de subirte a ella. Siempre debes hacerlo con calma y probarla antes de subirte para asegurarte de que esté segura. Sin mencionar que acercarse a una escalera o borde demasiado rápido puede ser desastroso si pierdes el equilibrio o cometes el más mínimo error de cálculo. Tómatelo con calma, asegúrate de tener un punto de apoyo seguro y un buen agarre, y procede con precaución. Si te acercas a un borde rápidamente, pregúntate por qué. ¿Tienes tanta prisa? Noticia de último momento: si te caes, tu horario se verá seriamente afectado. Con suerte, estás usando algún tipo de protección contra caídas, pero ¿realmente quieres ponerla a prueba? Tal vez haya una barandilla. ¿Qué pasa si tropiezas en el último minuto? Recuerde que las barandillas son compatibles si resisten tan solo 200 libras de fuerza. ¿Cree que serán efectivas si se estrella contra ellas a toda velocidad? ¿Por qué averiguarlo?
5. Pruebe el equilibrio antes de colocar peso
Los techos envejecen y se dañan. Algunos no estaban en muy buenas condiciones desde el principio. Desafortunadamente, no tienes idea de lo que está sucediendo debajo de la membrana. Asegúrate de conocer el estado de tu techo. Revísalo desde abajo si es posible y procede con precaución en la parte superior. Al primer indicio de un punto débil, detente. Haz una prueba. Esta idea también se aplica a subirse a una escalera, ya sea desde arriba o desde abajo. No es seguro simplemente colocar la escalera y listo, o subirse a una escalera que se ha movido o colocado mientras ya estabas en el techo. Asegúrate de que la base esté bien apoyada para que la escalera no se mueva una vez que tu peso esté sobre ella. Tomarte tu tiempo y actuar con precaución puede significar la diferencia entre la vida y la muerte.
Tu comportamiento es más importante para tu bienestar que cualquier otro factor. Si el mal comportamiento en el lugar de trabajo puede tener resultados tan trágicos, ¿por qué la gente no tiene más cuidado con sus acciones? Es algo sencillo de hacer. Puedes convertir fácilmente estas cinco ideas y muchas otras en tus propios hábitos para ser proactivo en la protección de tu propia vida.