A continuación se detallan algunas reglas generales de seguridad que lo ayudarán a mantenerse seguro en espacios confinados:
1. El área debe estar libre de peligros.
Antes de ingresar a cualquier espacio confinado, es imperativo que una persona competente realice una evaluación de riesgos para determinar si un espacio confinado está libre de materiales y sustancias nocivas. Esto ayudará a determinar si es seguro ingresar a un espacio confinado o si requiere medidas de precaución adicionales.
2. Pon a prueba la atmósfera
Se realiza una prueba de evaluación para determinar cualquier presencia de peligros químicos en la atmósfera del espacio confinado e identificar qué pasos a seguir y las condiciones que se deben cumplir para calificar como seguro para ingresar. Un trabajador capacitado debe realizar una serie de pruebas atmosféricas en el siguiente orden: 1) oxígeno; 2) gases combustibles; y 3) gases y vapores tóxicos. Los resultados de las pruebas deben registrarse o indicarse en el permiso de trabajo. Además, la formación se puede realizar a través de una plataforma de formación móvil para facilitar el acceso y el aprendizaje.
3. Ventilar
La ventilación adecuada es crucial en un espacio confinado. Mantiene la atmósfera en un nivel seguro y aceptable al introducir aire fresco continuo. También puede enfriar la temperatura y eliminar contaminantes, todo lo cual es beneficioso para proteger a los trabajadores de los riesgos para la salud presentes en el espacio confinado. Se debe utilizar ventilación mecánica como ventiladores y sopladores. Debería existir un sistema de alerta para alertar a los trabajadores cuando haya una falla en el sistema de ventilación.
4. Cuídense unos a otros
Cuando alguien esté trabajando en un espacio confinado, asegúrese siempre de que haya una vigilancia alternativa que pueda llamar a los equipos de rescate en caso de emergencia o que esté capacitado y equipado para realizar un rescate. La atmósfera debe ser monitoreada continuamente desde fuera del espacio confinado.
5. Utilice EPP
Utilice un arnés, una línea de vida o dispositivos de monitoreo continuo de gas. Además, utilice un aparato respiratorio autónomo si es necesario.