Cualquier persona que esté expuesta al frío extremo o que trabaje en ambientes fríos puede correr riesgo de sufrir estrés por frío. Cuando el clima se vuelve frío, el cuerpo tiene que trabajar más para mantener su temperatura central. Y a medida que las temperaturas bajan y la velocidad del viento aumenta, nuestros cuerpos pierden calor más rápidamente, especialmente cuando estamos activos.
Estas bajas temperaturas pueden resultar incómodas, pero también representan un grave peligro en el lugar de trabajo. Todo empleador y profesional de la seguridad debe comprender el estrés por frío y lo que se puede hacer para proteger a los trabajadores durante los meses más fríos.
¿Qué es el estrés por frío?
El estrés por frío ocurre cuando la temperatura de la piel y la temperatura central del cuerpo descienden por debajo del rango normal.
Si el cuerpo no puede calentarse, el estrés por frío puede provocar afecciones como hipotermia y congelación.
Factores de riesgo para el estrés por frío
Los siguientes factores de riesgo pueden aumentar la susceptibilidad de un individuo al estrés por frío:
- Ropa mojada o húmeda
- Ropa inapropiada para el clima o falta de equipo de protección personal.
- Sobreesfuerzo o agotamiento
- Condiciones de salud preexistentes, como diabetes, hipotiroidismo e hipertensión.
- Mala salud física
Los efectos de las temperaturas frías en el cuerpo
Cuando lidiamos con el estrés por frío, nuestros cuerpos trabajan para mantener nuestro núcleo interno a la temperatura necesaria para su funcionamiento óptimo. Lo hace desviando el flujo sanguíneo, redirigiéndolo desde la piel exterior y las extremidades hacia nuestras regiones centrales (el pecho y el abdomen). Como resultado, las extremidades y la piel expuesta comienzan a enfriarse rápidamente, lo que aumenta el riesgo de trastornos relacionados con el resfriado.
Hipotermia
La hipotermia aparece cuando el cuerpo pierde calor más rápidamente de lo que puede reponerlo y la temperatura corporal desciende a menos de 95°F.
Los síntomas dependen de la gravedad de la afección, pero pueden incluir confusión, alteración de los reflejos y disminución de la frecuencia cardíaca.
Congelación
La congelación ocurre cuando la piel y los tejidos subyacentes se congelan.
Al igual que la hipotermia, los síntomas de la congelación dependen de la gravedad de la afección. Los casos más leves de congelación pueden manifestarse como entumecimiento o ampollas, mientras que los casos graves pueden requerir una amputación.
Pie de zanja
El pie de trinchera ocurre cuando el pie se mantiene frío y mojado durante un período prolongado de tiempo (generalmente debido a que el interior de la bota del trabajador se moja y permanece).
Los trabajadores con pie de trinchera pueden experimentar entumecimiento y un cambio en el color del pie (ya sea azul o rojo). Los casos graves pueden provocar ampollas y llagas abiertas.
sabañones
Los sabañones ocurren cuando la piel se expone repetidamente a temperaturas frías, lo que daña los capilares (pequeños vasos sanguíneos).
Los sabañones pueden ser dolorosos, formar ampollas o causar sensación de ardor o picazón en el área afectada.
Prevenir el estrés por frío
Consejos para empleadores
- Conozca los signos y síntomas del estrés por frío y los trastornos relacionados con el frío.
- Capacite a sus empleados sobre cómo reconocer los trastornos relacionados con el resfriado y cómo brindarles tratamiento de primeros auxilios.
- Proporcionar a los empleados EPP que sean adecuados para las condiciones ambientales.
- Implementar controles de ingeniería como calentadores radiantes o cerramientos de edificios para proteger las áreas de trabajo de corrientes de aire y reducir la sensación térmica.
- Anime a los empleados a tomar descansos frecuentes en áreas cálidas.
- Permita que sus nuevos empleados se aclimaten y acomodelos hasta que desarrollen tolerancia para trabajar en el ambiente frío.
Consejos para empleados
- Conozca los síntomas del estrés por frío y los trastornos relacionados con el frío.
- Vigila tu condición física, así como la de tus compañeros de trabajo.
- Use ropa apropiada para trabajar en el frío.
- Manténgase usted y su ropa lo más secos posible.
- Mantenga ropa adicional accesible en caso de que sus prendas o equipo de protección se mojen.
No deje la seguridad al margen
En el verano, todos los empleadores y profesionales de la seguridad se preocupan por controlar el estrés por calor y prevenir enfermedades relacionadas con el calor. Es importante adoptar la misma actitud también en los meses de invierno. El estrés por frío no es una broma y cualquiera que trabaje al aire libre durante el invierno puede estar en riesgo.